
Se sabe que desde inmemoriales tiempos este privilegiado lugar fue elegido para vivienda y asentamiento por los
comechingones, primitivos habitantes de la zona.
Pueblo
agricultor, cazador y alfarero encontraban en las cañadas y barrancas, ríos y arroyos, montes de algarrobos, chañares y espinillos los elementos necesarios y abundantes para vivir. Con la armonía que tan bello paisaje impregna al hombre, desarrollaron su cultura y su vida.
Pasó mucho tiempo, transcurría el año 1942, cuando
Don Miguel Capuano decide realizar sobre la ribera sur del río Santa Rosa, que atravesaba la Estancia Santa Filomena, el loteo que posteriormente se transformaría en Villa Santa Mónica.
A partir de allí, el hermoso y agreste colorido del paisaje fue recibiendo la visita de distintos habitantes, y embelesados turistas que a fines de 1950 ya disfrutaban de hermosas residencias.
Con el esfuerzo de sus pobladores llegó al lugar la energía eléctrica, el agua corriente, el pavimento, el
Aeródromo Santa Mónica, la Escuela y el Dispensario que sumados a los emprendimientos comerciales, satisfacen las necesidades básicas.
Lugar de paso obligado, para quienes se dirigen a
Yacanto y balcón privilegiado para admirar y contemplar al imponente
Cerro Champaquí de 2790 metros., y las
Sierras Chicas.
Hoy a más de 60 años de su creación, lo que era potencialmente un futuro turístico, hoy es realidad.
Santa Mónica de Calamuchita, te ofrece uno de los mejores lugares en el
Valle de Calamuchita, para disfrutar ese descanso que tanto necesitas, con su maravilloso río Calamuchita, sus senderos, el paisaje y el aire serrano.